En España lo conocemos como Jaimito, aunque en el resto del mundo su nombre es Pepito. Este niño impredecible e impulsivo ha acompañado a generaciones enteras dando lugar a los chistes más graciosos. A continuación recogemos los mejores chistes de Pepito, aquellos que nos han acompañado durante nuestra infancia y que, incluso ya en la edad adulta, nos siguen haciendo gracia.
ÍNDICE
2. Chistes de Pepito para niños
En ocasiones, poner a Pepito como protagonista de un chiste es solo un pretexto para contar chistes groseros. Empezamos con una buena dosis de chistes de Pepito para adultos o, como también se les podría llamar, chistes de Pepito sin censura.
Pepito a su madre:
- Mamá, cuando terminas de hacer el amor con papá, ¿le das las gracias ?
- Pues, no…
- ¿Y entonces para qué sirve la educación sexual?
Pepito le dice a su madre:
- Ya no quiero jugar más con Jaimito al rompecabezas.
- ¿Por qué?
- Porque al primer martillazo ya está llorando.
- Pepito, ¿crees que algún día la tecnología sustituirá al papel?
- No creo, sería un poco difícil limpiarse el culo con el móvil...
Pepito entra a la cocina y le dice a la empleada:
- ¡Abuelita abuelita!
La madre de Pepito le dice:
- ¿Por qué llamas a la sirvienta 'abuelita'?
- ¡Porque papá la llama mamasita!
Le dice la madre a Pepito:
- Pepito, ¿por qué le pegaste a tu hermana con la silla?
¡Porque el sofá pesaba demasiado!
Pepito le dice a su madre:
- Mamá, ¿es la abuelita fosforescente?.
- No, hijo.
- Entonces, se está electrocutando.
Pepito a su madre:
- Mamá, mamá, ¿el retrete da vueltas?.
- No, Pepito.
- Entonces he cagado en la lavadora.
Pregunta la maestra de Pepito:
- ¿Pepito, quien fue Juana de Arco?
- Una drogadicta, maestra.
- ¿De donde has sacado eso?
- El libro dice que murió por heroína.
Le dice Pepito a su madre:
- ¿Mamá, la luz se come?
- No hijo, ¿por qué lo preguntas?
- Porque ayer papá le dijo a la criada 'apaga la luz y pontela en la boca'.
Pepito a su abuela
- Abuelita, abuelita, necesito que cierres los ojos.
- ¿Y eso por qué Pepito?
- Porque mi papá me dijo que cuando cierres los ojos seremos millonarios.
- ¡Mamá, mamá, dame un poco de pan para rebañar la taza!
- ¡Anda, Pepito, no seas guarro y tira de la cadena!
Los chistes que presentamos a continuación son aptos para los más pequeños de la casa, aunque Pepito no es siempre un buen ejemplo para ellos. Al fin y al cabo, estos chistes para niños de Pepito reflejan su comportamiento infantil y curioso, ya sea en el colegio o en casa. Lo que está claro es que pasarás un buen rato.
- Profe, ¿me castigarías por algo que no he hecho?
- Claro que no Pepito.
- Genial profe, no he hecho los deberes.
- Pepito ve a la tienda y tráeme pegamento que no tengo.
- No quiero, mamá, estoy jugando.
- Entonces te pegaré.
- No puedes mamá, no tienes pegamento.
- Mamá, mamá. ¿Sabe qué? He aprendido a escribir.
- ¿Ah sí? ¿Y qué has escrito?
- Mamá, he aprendido a escribir no a leer.
- Pepito, estoy muy enfadada contigo. Le dijiste fea a tu hermana y ahora está llorando. Ve y dile que lo sientes.
- Lo siento hermanita, siento mucho que seas fea.
La profesora le dice a Pepito:
- A ver, si yo digo que ‘fui rica’ es pasado… pero si digo, ‘soy guapa’, ¿qué es?
- Imaginación profe, mucha imaginación.
La profesora le dice a Pepito…
- A ver, cuéntame, ¿cómo te imaginas la escuela ideal?
- Mmmmm, ¡cerrada profe!
Aparece una señora muy fea en la tienda de Pepito y le dice:
- Por favor, quiero una escoba.
- ¿Se la envuelvo o se va con ella?
- ¡Pepito! ¡Estas notas merecen un escarmiento!
- ¿Verdad que sí, mamá? ¡Vamos, que yo sé donde vive la maestra!
- A ver Pepito… ¿Simón Bolívar murió en...?
- ¿Fermo...?
El profesor le pregunta a Pepito:
- ¿Cómo suena la M con la A?
- Ma.
- Muy bien Pepito. Y si le colocas una tilde, ¿cómo suena?
- Matilde.
- Veamos, Pepito, ¿qué puedes decirme de la muerte de Cristóbal Colón?
- Que lo siento muchísimo, señorita.
El padre de Pepito le pregunta:
- Pepito, ¿cómohan ido los exámenes?
- Pues no lo sé, pero los profesores son muy religiosos.
- ¿Religiosos? ¿Por qué?
- Pues porque mientras leían mi examen no paraban de decir 'Ay, Señor', 'Ave María purísima', 'Virgen santa'.
El profesor le pregunta a Pepito en clase de matemáticas:
- Pepito, si en un bolsillo del pantalón tienes 10 euros y en el otro tienes tres billetes de 100 euros, ¿qué tienes?
- Los pantalones de otro, profesor.
La madre le dice a Pepito:
- A ver si te portas bien, porque cada vez que haces algo malo me sale una cana.
- Entonces tú debiste haber sido muy traviesa, porque mira cómo está la abuela.
Se levanta Pepito y le dice a su papá:
- Papá, papá, hoy me he levantado con ganas de trabajar.
- ¿Y qué vas a hacer?.
- Acostarme para que se me quiten las ganas.
Estaba Pepito en el colegio y le dice a la profesora:
- Profe, ¿le puedo dar un beso?
- Por supuesto que sí, ya veo que quieres mejorar tus modales.
- No, es que tengo gripe y se la quiero pasar.
Pepito ve a su tía por la calle y le dice:
- Hola tía, ¿de dónde vienes?
- Vengo del salón de belleza.
- Ah, hoy no estaba abierto por lo que veo.
- Pepito, ¿tú rezas antes de comer?
- No, seño, mi madre es muy buena cocinera.
La abuela de Pepito le dice:
- Querido, quiero que me digas lo que más te gusta de mi.
- ¡El dinero que me das los viernes, abuela!
Jaimito a su padre:
- He escrito una redacción que ha conmovido al profesor.
- ¿Y cómo lo sabes, Pepito?
- Porque me ha dicho que daba pena.
Llega la hermana de Pepito del colegio y Pepito le pregunta:
- ¿Qué estáis dando en el cole ahora?
- Los decimales.
- ¡Oh! ¡Qué bonito! Con sus iglús, sus trineos y sus perros...
Pepito entrega los deberes y la profe dice:
- ¡Pepito, te falta la presentación!
- ¡Ay, perdone! ¡Damas y Caballeros, con ustedes, los debereees!
Pepito se levanta en mitad de la clase y la profesora le dice:
- Pepito, ¡falta un cuarto de hora!
- ¡Pues te aseguro que yo no lo he cogido!
- Pepito, ¿no te da vergüenza ser el último de la clase?
- Alguien debe sacrificarse...
La madre de Pepito:
- Pepito, ¿tú eres miedoso?
- Qué va, yo no le temo ni al malamén.
- ¿Y ese quién es?
- No sé, pero siempre que rezan dicen 'líbranos del mal amén'.
Pepito le dice a Jaimito:
- Oye Jaimito, pásame otro champú.
- Pero si ahí en el baño hay uno.
- Sí claro, pero este es para cabello seco y yo ya me lo he mojado.
Pregunta Pepito en mitad de la clase:
- Oiga profe, una pregunta.
- ¿Sí?
- ¿Por qué el examen no traía preguntas sobre su vida, si es de lo que más ha hablado durante el trimestre?
La maestra pregunta a Pepito:
- ¿Cómo mató David a Goliat?
- Con una moto.
- ¿Cómo con una moto? Será con una honda.
- ¡Ahhh!, ¿Pero quería usted la marca?.
- ¿Papá. recuerdas cuando al principio del curso me dijiste que me darías 1.000 euros si pasaba de curso?
- Ay Pepito, ¡qué alegría! No me digas que…
- ¡Sí papá! ¡Te has ahorrado 1.000 euros!
Pepito a su padre:
- Papá, papá, ¡vinieron a preguntar si aquí vendían un burro!
- ¿Y qué les dijiste, hijo?
- Que no estabas.